#44 El Dilema de Eutifrón
August 22, 2012Gracias por todo lo que usted hace en su servicio al Señor y a Su Iglesia. Eso es de gran valor para nosotros, así que me siento con confianza de decir que es de gran valor para Él también.
Me preguntaba si usted podría tomar un tiempo para ayudarme con algunos problemas que estoy teniendo en mi trato con el dilema de Eutifrón. Como usted sabe, el dilema de Eutifrón pregunta algo parecido a:
‘¿Es el bien bueno porque Dios lo aprueba, o Dios lo aprueba porque es bueno?'
Ahora bien, el teísta no quiere decir que el Bien es bueno simplemente porque da la casualidad de que Dios lo aprueba, ya que esto hace que la moral sea arbitraria (llamamos a esto el “Cuerno A”). Él tampoco quiere decir que Dios aprueba el Bien porque éste, de hecho, es bueno, ya que eso parece implicar la existencia de estándares de la bondad que están fuera de Dios (llamamos a esto el “Cuerno B”).
Por lo tanto, el teísta trata de dividir los cuernos del dilema diciendo que Dios es necesariamente bueno y que la fuente y el estándar del Bien es la naturaleza misma de Dios. Por un lado, esto evita el Cuerno B, ya que la bondad, en vez de existir fuera de Dios, es parte de la naturaleza misma de Dios (y de hecho depende de él para su existencia). Y, por otro lado, evita el Cuerno A, ya que Dios no es arbitrario, sino más bien, que opera de acuerdo a un estándar de moral definido (es decir, la naturaleza necesariamente buena de Dios).
Sin embargo, parece que el ateo ahora puede reformular el dilema al preguntar:
‘¿Es la naturaleza de Dios buena debido a la forma que es Dios, o es buena porque ella empareja o coincide con alguna norma externa de la bondad?’
Me parece que la respuesta al dilema reformulado tiene que involucrar algo así como la afirmación de que la naturaleza de Dios no podría ser cualquier cosa que no sea buena—es decir que la naturaleza de Dios no ‘tiene que ser’ de cierta manera. Pero no estoy seguro de lo que significa decir eso, ya que a menos que tengamos un concepto del Bien afuera de Dios, esto no parece llegar ningún lado en el sentido de que no parece poner restricciones a la naturaleza de Dios. Sospecho que el concepto de mundos posibles podría ser útil aquí. Pero no estoy seguro de cómo o por qué. Mi sugerencia para un argumento sería algo como lo siguiente:
(1) Dios es, por definición, un ser máximamente grande.
(2) Eso implica que Él es metafísicamente necesario y moralmente perfecto.
(3) Por lo tanto, por (2), Dios existe en todos los mundos posibles.
(4) Pero, si los valores morales son objetivos, la perfección moral representa (o por lo menos tiende hacia) un conjunto único y máximo de los valores morales.
(5) Por lo tanto, por (1), (3) y (4), se deduce que Dios tiene la misma característica moral en todos los mundos posibles.
(6) Por lo tanto la naturaleza de Dios es buena no por la manera que Él es ni por como el encaja con referencia a un estándar externo de bondad.
-la cual responde al dilema reformulado.
Esto me suena un poco bien. Pero no estoy convencido de la (4). También me preocupa que he pensado demasiado acerca de esto y de que a este punto he comenzado a decir tonterías. Parece que estoy dando vueltas en círculos en mi cabeza. Si usted pudiera explicar las cosas de forma muy clara y sencilla para mí, yo estaría muy agradecido.
James
United States
Respuesta de Dr. Craig
R
James, creo que sus intuiciones están correctas. El argumento que usted da sólo necesita de algunos ajustes.
Cuando el ateo dice, "¿Es la naturaleza de Dios buena debido a la forma que es Dios, o es buena porque ella empareja o coincide con alguna norma externa de la bondad?", el segundo cuerno del dilema no representa nada nuevo— es lo mismo que el segundo cuerno en el dilema original, es decir, que Dios aprueba algo porque esa cosa es buena y ya hemos rechazado eso. Así que la pregunta es de si estamos atascados en el primer cuerno del dilema. Bueno, si por "tiene que ser" el ateo quiere decir que el carácter moral de Dios es una propiedad contingente de Dios, es decir, una propiedad la cual pudiera estar carente en Dios, entonces la respuesta obvia es "No." El carácter moral de Dios es esencial para Él. Es por eso que decimos que era parte de Su naturaleza. Decir que alguna propiedad es esencial para Dios es decir que no hay mundo posible en el que Dios pudo haber existido y en el que Él carecía de esa propiedad. A Dios no le sucedió por accidente el ser amoroso, bondadoso, justo, y así sucesivamente. Él es esencialmente de esa manera.
Usted no necesita preocuparse por "lo que significa decir eso a menos que tengamos un concepto del Bien afuera de Dios, esto no parece llegar ningún lado," ya que eso es confundir la ontología moral con la semántica moral. Nuestra preocupación es con la ontología moral, es decir, el fundamento en la realidad de los valores morales. Nuestra preocupación no es con la semántica moral, es decir, con el significado de los términos morales. El teísta está completamente listo para decir que tenemos una comprensión clara del vocabulario moral como "bueno," "malo" correcto," y así sucesivamente, sin hacer referencia a Dios. Por lo tanto, es de carácter informativo saber que "Dios es esencialmente bueno." Con mucha frecuencia, los oponentes del argumento moral lanzan ataques equivocados sobre este cuando confunden la ontología moral con la semántica moral o, incluso más a menudo, con la epistemología moral (cómo llegamos a conocer el Bien).
Si se preguntara el por qué Dios es el paradigma y el estándar de la bondad moral, entonces creo que la premisa (1) de su argumento nos da la respuesta: Dios es el mayor ser concebible, y es mayor ser el paradigma de la bondad que cumple con ella. Su premisa (2) también es verdadera, lo cual es por qué Dios puede servir como el fundamento de las verdades morales necesarias, es decir de las que se sostienen en todos los mundos posibles. No estoy seguro de qué quiere decir con la premisa (4), pero creo que es dispensable. Todo lo que usted necesita decir es que los valores morales (o al menos muchos de ellos) no son contingentes, sino que se sostienen en todos los mundos posibles. Entonces Dios fundamenta esos valores en todos los mundos posibles. Me parece que eso resuelve la cuestión. ¡Hasta ahora de pensar que está hablando tonterías, me parece que nos ha dirigido hacia la respuesta correcta!
- William Lane Craig