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#584 Pregunta sobre el Aniquilacionismo

August 26, 2018
P

Hola Dr. Craig,

Mi pregunta para usted tiene que ver con la naturaleza del infierno. He leído y escuchado algunos de sus pensamientos sobre este tema, pero no le he visto hacer un intento para dar alguna especie de defensa real de su posición específica sobre ese punto. Si no estoy equivocado, usted mantiene la perspectiva tradicional del consciente tormento eterno en vez de la perspectiva de la inmortalidad condicional.

Sin embargo, me parece que la Escritura está mucho más en favor de la perspectiva de la inmortalidad condicional. En el Antiguo Testamento, parece que los "prototipos" de juicio final (el diluvio, Sodoma y Gomorra) resultan en la destrucción de los perdidos y no en la tortura de ellos. Además en el Nuevo Testamento, parece como si Pablo, Pedro e incluso Jesús enseñan que aquellos que no son salvos heredan la muerte—no un consciente tormento en la eternidad. La Biblia dice que la paga del pecado es muerte (Romanos 6:23), aquellos que creen en Él no se pierden, mas tienen vida eterna (Juan 3:16). Estoy seguro de que usted está consciente de que estos y otros versículos en el Nuevo Testamento parecen indicar que la vida eterna está sólo preservada para aquellos que creen en Cristo. Ellos son aquellos que, en última instancia, no serán destruidos. Además, esto no es un problema de la traducción o de tomar versículos fuera de contexto. Sin escribir una novela, realmente parece que cuando se hace un estudio del lenguaje [bíblico] o un estudio del contexto uno también realmente encuentra apoyo para la inmortalidad condicional.

Estoy curioso por saber cómo usted respondería a estos argumentos y por qué usted rechaza personalmente la inmortalidad condicional ¡Muchas gracias!

Brantley

United States

Respuesta de Dr. Craig


R

Me parece que la perspectiva tradicional de que el infierno implica un tormento eterno y consciente está razonablemente bien atestiguada en las Escrituras. "Estos sufrirán el castigo de eterna destrucción, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder" (II Tesalonicenses 1.9). Las negaciones de esta doctrina surgen principalmente, creo, debido a un aborrecimiento emocional y a objeciones filosóficas no convincentes.

Yo no pretendería que los argumentos exegéticos no están disponibles para el que creen en el aniquilacionismo, pero considero que los argumentos que tú mencionas, Bentley, son fundamentalmente erróneos.

En primer lugar, simplemente es una mala hermenéutica tomar los "prototipos" [de juicio] del Antiguo Testamento como claves para interpretar la doctrina del Nuevo Testamento sobre el estado de los perdidos después de la muerte. Tomas un gran riesgo en tratar de  imponer alguna característica accidental de esos relatos a la enseñanza del Nuevo Testamento, lo cual puede ser contrario a esa característica. Por supuesto, esos juicios de personas en el Antiguo Testamento implican la destrucción de las personas involucradas en el sentido de la conclusión de sus vidas terrenales, ¡a menos que ellos tuvieran todavía con vida hoy en día, preservados de alguna manera a través de los siglos en las cárceles de Palestina! Además, lo que esos prototipos esencialmente implican es la muerte de las personas juzgadas, y la doctrina del Nuevo Testamento del tormento eterno implica exactamente la misma cosa.

Eso forma una buena transición al segundo punto. La falla más fundamental de tu argumento es el fracaso de apreciar que la existencia eterna no es lo mismo que la vida eterna. Los perdidos en el infierno tienen una existencia eterna pero no una vida eterna. En el Nuevo Testamento, la vida eterna no es bios (vida física, de la cual deriva nuestra palabra biología), sino más bien zōē (vida espiritual). Los perdidos, incluso si tienen vida física por haber resucitado, no tienen zōē. De hecho, están espiritualmente muertos y permanecerán en ese estado para siempre.

Así que, por supuesto, la vida eterna está disponible sólo a través de Cristo y, por lo tanto, está condicionada al arrepentimiento y a la fe. Hasta que los aniquilacionistas no entiendan el hecho de que una persona puede existir para siempre y, aún así, estar espiritualmente muerta, ellos fundamentalmente malinterpretarán la doctrina del Nuevo Testamento de la inmortalidad.

- William Lane Craig