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#813 Justificación y Regeneración

September 24, 2023
P

Hola Dr Craig

Quería hacer algunas preguntas sobre la regeneración y la justificación. Por favor note, estoy haciendo estas preguntas para poder tener un mejor entendimiento de estas doctrinas

1) Según tengo entendido, nadie puede entrar en el reino de Dios a menos que sea regenerado (Juan 3:5-8). ¿Es esto correcto?

2) ¿Existe alguna razón bíblica/teológica por la que debamos ser regenerados para poder entrar en el reino de Dios? ¿O es simplemente algo que aceptamos porque Jesús lo enseñó y sabemos que lo que Jesús enseñó es correcto (sin necesariamente conocer una razón bíblica/teológica para esto)?

3) Si somos justificados por imputación, ¿cuál es la razón por la que también necesitamos ser regenerados? Parece que si estamos cubiertos por la justicia de Jesús, entonces no estoy seguro de por qué se requiere también la regeneración.

4) Si la regeneración es requerida para entrar en el reino de Dios, ¿no significa eso que somos justificados por imputación y regeneración?

5) ¿Cuál es el propósito de la regeneración si terminamos pecando de nuevo? No lo digo de forma escéptica. Sólo estoy tratando de entender el propósito bíblico/teológico de la misma para entender esta doctrina más claramente

6) ¿Cuál es la relación entre justificación y regeneración?

Anónimo

United States

Respuesta de Dr. Craig


R

Son buenas preguntas que merecen reflexión. La justificación y la regeneración, tal como yo las entiendo, pertenecen a dos órdenes diferentes, uno jurídico y otro ontológico (específicamente espiritual). La justificación es la provisión de Dios de un perdón legal para nosotros de nuestros pecados y la imputación legal de la justicia de Cristo a nosotros. La regeneración es el acto inicial de santificación del Espíritu Santo, que nos vivifica, sana nuestra relación rota con Dios y restaura la comunión con Dios. Como tales, estos dos actos son diferentes y complementarios.

Así que en respuesta a tus preguntas

1) Sí, debemos nacer de nuevo espiritualmente para tener vida eterna.

2) Sí; la razón es que las personas espiritualmente muertas no pueden experimentar la comunión con Dios. No tienen vida espiritual y, por tanto, no pueden conocer a Dios. Piense, por analogía, en el perdón legal de un criminal que ha fallecido. Ahora es inocente de sus crímenes, ¡pero sigue igual de muerto!

3) La justificación y la imputación son actos puramente jurídicos. No tienen ningún impacto causal sobre nosotros para cambiarnos. Pensemos en un asesino condenado al que el Gobernador ha indultado. El indulto legal no produce ningún cambio de carácter moral en el criminal, que puede seguir siendo tan malvado como siempre, aunque ahora inocente a los ojos de la ley. Aun así, no lo querrías como tu vecino.

4) No, porque la regeneración no es un acto legal. Es el primer paso en nuestra transformación moral, ese proceso de santificación de parecernos cada vez más a Cristo, preparándonos para el cielo. Es necesaria para la salvación, pero no forma parte de la justificación.

5) La regeneración es necesaria para encaminarnos a pecar cada vez menos. Somos como el criminal indultado que decide emprender un programa de reforma moral, cuyo resultado es un carácter transformado.

6) La justificación y la regeneración están íntimamente relacionadas. Debería decir que ocurren simultáneamente en la vida de una persona cuando pone su fe en Cristo. En ese momento el Espíritu Santo entra en él, trayendo nueva vida, y Dios lo declara perdonado de todos sus pecados y justo ante Sus ojos.

Espero que esto te ayude.

- William Lane Craig