#700 ¿Es incorrecto votar por un partido alternativo en los Estados Unidos?
January 24, 2021En la estrategia política de elegir al menos peor, ¿cuál es la opinión del Dr. Craig sobre los cristianos que votan por candidatos alternativos de un tercer partido, incluso si las posibilidades de que esos candidatos en los Estados Unidos sean elegidos es muy, muy bajas? ¿Deberían los cristianos ser más pragmáticos, evitando candidatos de algún partido alternativo (como el Partido de la Constitución: http://www.constitutionparty.com/), al menos hasta que tengan una posibilidad razonable de ganar las elecciones? Yo sé por estos dos podcasts https://www.reasonablefaith.org/media/reasonable-faith-podcast/the-presidential-election/,https://www.reasonablefaith.org/media/reasonable-faith-podcast/will-there -ser-una-reacción-contra-los-evangélicos / que el Dr. Craig ve las pautas políticas (o plataformas y proyectos que se convertirán en planes de acción) como uno de los factores más importantes (si no el más importante) cuando se va a elegir los candidatos políticos.
Parece que el Dr. Craig está defendiendo las acciones por encima del carácter, ¿Cierto? ¿Pero no es el plan político parte del carácter de la persona? ¿O el Dr. Craig está indicando que el plan político es una consecuencia del carácter?
Ken
Estados Unidos
United States
Respuesta de Dr. Craig
R
Debo confesar, Ken, que me inclino a pensar que quien vota por un candidato de un partido alternativo el cual no tiene ninguna posibilidad realista de ganar es culpable de abandonar su deber. En práctica, él deja en manos de otros determinar quiénes serán nuestras autoridades públicas. Hay demasiado en juego en nuestras elecciones nacionales para renunciar a nuestra responsabilidad de ayudar a elegir a nuestros líderes.
Definitivamente estoy proponiendo que demos prioridad al plan político sobre el carácter. Los evangélicos estadounidenses realmente maduraron políticamente, yo creo, durante la presidencia de Jimmy Carter. Muchos de nosotros estábamos emocionados de que un hombre que decía ser abiertamente cristiano, nacido de nuevo, estuviera al mando, guiando a nuestra nación. Sentimos que podíamos orar con confianza por él, sabiendo que estaba en sintonía con Dios. Sin embargo, para muchos evangélicos, el presidente Carter llegó a ser una profunda decepción debido a las políticas que buscaba implementar. Lo que llegamos a ver es que el carácter sin el plan de acción correcto es tan vacío como la fe sin obras.
Por eso los evangélicos, a diferencia de otros grupos de votantes, han dejado de votar por un candidato solo porque es "uno de nosotros". Al contrario, queremos saber cuáles son sus posiciones y si cumplirá las promesas políticas que ha hecho.
Es evidente que las pautas políticas no fluyen del carácter. Un buen hombre que sea débil, fácilmente influenciable o distraído, puede no ser un líder eficaz. Un mal hombre podría adoptar las políticas correctas por razones puramente pragmáticas, porque atraen a un gran grupo de votantes cuyo apoyo él necesita. Importa poco por qué él adopta estas políticas; lo que importa es que adopte las políticas correctas.
Es por eso que, en las próximas elecciones, animo a los cristianos a dar prioridad al plan político sobre el carácter y a votar por candidatos que tengan la mayor posibilidad de promover los valores bíblicos en la esfera pública.
- William Lane Craig